Decenas de turistas y ciudadanos chinos fueron testigos del desplome del techo de un histórico templo, conocido como la Torre del Tambor de Fengyang, en China. La estructura de la edificación, construida en 1375, cedió y provocó la caída de escombros y una nube de polvo. El hecho ocurre apenas dos meses después de que el monumento haya sido restaurado por un proyecto de renovación que costó medio millón de dólares.